Todas nuestras actuaciones han buscado, y seguirán buscando, la solución inmediata del conflicto para que las Instrucciones de inicio de curso sean retiradas y, con ello, que la huelga no sea necesaria.
Las comunicaciones realizadas a la Presidenta de la Comunidad de Madrid y a la Consejería de Educación sólo han obtenido silencio. Las preguntas formuladas no han sido contestadas. La peticiones no han sido atendidas. La mínima marcha atrás dada al escenario planteado inicialmente con las Instrucciones publicadas, no ha sido suficiente.
Respetamos el legítimo derecho a la huelga de los trabajadores.
Respetamos igualmente el derecho a no hacer huelga.
Agradecemos la responsabilidad demostrada por el profesorado y sus representantes sindicales en la búsqueda de escenarios adecuados de reivindicación y que la decisión sobre la huelga no se haya tomado a la ligera.
Las familias entendemos y compartimos la necesidad de la movilización en defensa de la Escuela Pública. La huelga no es un escenario deseable para las familias, ni adecuado para el alumnado. Sabemos que el profesorado y sus representantes lo comparten.
Respetamos la libertad de las familias en la decisión que adopten sobre si deben llevar a sus hijos e hijas al centro educativo en las jornadas de huelga.
Pensamos que lo adecuado es que las familias lleven a sus hijos e hijas a los centros educativos, y que sean atendidos por el profesorado que no haga huelga.
Estamos seguros de que las familias y el resto de la Comunidad Educativa deben realizar actuaciones reivindicativas conjuntas durante las jornadas de huelga en defensa de la Escuela Pública.
La responsabilidad directa de los perjuicios ocasionados al alumnado y sus familias es del Gobierno Regional.
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